Alfonso Echávarri presentó la ponencia sobre el programa Alienta. Foto: Luis Santiago |
El Teléfono de la Esperanza de Málaga tuvo la oportunidad de dar a conocer el programa Alienta a los participantes en las Jornadas Técnicas 'Sobre Vivir' para la Prevención del Suicidio. Alfonso Echávarri del Teléfono de la Esperanza de Navarra presentó a nuestra compañera Aurelia González, que se encargó de explicar el nacimiento, objetivos y desarrollo del programa.
Aurelia González inició su ponencia recordando que el suicidio en España "es desde 2014 la primera causa de muerte no natural".
Tasas de suicidio.
La ponente detalló las siguientes cifras de 2012:
España - 6,2 / 100.000 habitantes
Andalucía - 7,7 / 100.000 habitantes
Málaga - 8,8 /100.000 habitantes
Además, destaca la incidencia en una zona de la comarca de Antequera y muninicipios de Córdoba y Sevilla.
Distritos donde se trabaja.
El programa Alienta arrancó en 2014 gracias a un convenio firmado por el Ayuntamiento de Málaga con el Teléfono de la Esperanza y la ONG Justalegría. Inicialmente se empezó a trabajar en el distrito Bailén-Miraflores donde el 38,4% de la población son usuarios de los Servicios Sociales para pasar posteriormente a Carretera de Cádiz, distrito en el que el 21,6% de la población es atendido por los Servicios Sociales. En octubre de 2016, los responsables del programa lo han activado en Ciudad Jardín, donde el 37,28% de la población es usuaria de los servicios sociales.
La primera parte del trabajo consiste en formar a informantes clave en cada distrito para lo cual se imparte un curso de Psicología Positiva a los trabajadores sociales y se les facilita un extenso cuestionario para que completen los usuarios. "Ellos deben conocer los mitos y realidades sobre el suicidio, los factores de riesgo y como se vive el suicidio en las familias", detalló González, que reveló como desde ese momento los trabajadores sociales fueron detectando casos de ideaciones suicida en diferentes personas.
Aurelia González durante la exposición de su ponencia. Foto: Luis Santiago |
Formación de psicólogos. En la primera fase, se detectóa 19 personas en riesgo elevado y todas ellas fueron derivadas al Teléfono de la Esperanza donde fueron atentidas terapeúticamente.
Además, se impartió formación a los psicólogos que luego se encargaron del Taller de Fortalezas Personales. Estas generan emociones positivas que dan sentido a la vida y son las siguientes:
- Básicas: perdón y gratitud.
- Fortalezas-diana: curiosidad, aprendizaje, perspectiva, vitalidad, prudencia, autoregulación y esperanza.
Ana Manrique, responsable del Taller de Supervivientes. Foto: Luis Santiago |
Taller de supervivencia. Se imparte a las personas que han sufrido el suicidio de un ser querido en su familia a lo largo de nueve meses. La coordinadora del programa indicó que dos líneas de trabajo con ellos son "que cada miembro de la familia puede vivir su propia comprensión, contexto y significado de la pérdida sufrida y se les enseña a separar la forma de la muerte de la persona fallecida". El 75% de los participantes en este taller, 34 personas, concluyeron que vivían una mejoría en sus vida después de participar en él.
Por otra parte, 31 personas han asistido hasta el momento en el Taller de Fortalezas Personales y 37 recibieron terapia directa en el Teléfono de la Esperanza.
Otros recursos activados en el programa han sido la edición de dípticos informativos, un protocolo para los trabajadores de los distritos y la puesta en marcha de la web www.razonesparavivir.org, que hasta octubre de 2016 ha tenido 8.000 visitas.