martes, 30 de agosto de 2022

Calendario del programa de actividades contra la soledad y el aislamiento de los mayores

 



'La Brújula de la Esperanza' es el programa de actividades para mayores que el Teléfono de la Esperanza desarrolla desde el año 2020 en colaboración con el Área de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Málaga para combatir la soledad no deseada y el riesgo de aislamiento que pueden sufrir muchas personas, especialmente las que viven solas.

El 22 de septiembre iniciamos el nuevo curso de actividades con el taller 'Recursos y empoderamiento social'.

Los teléfonos para informarse e inscribirse en esta y todas las actividades son los siguientes:

682 353 251

951 76 42 27

952 652 51

Correo: programamayores@telefonodelaesperanza.org

 

El programa ha tenido una gran acogida en sus talleres, sesiones grupales y atención telefónica como hemos narrado en diversas entradas a este blog.

Si tienes interés en saber en que consisten las actividades, dejamos aquí los enlaces con las experiencias de sus participantes para así poder inscribirte con más información o inscribir a  una persona de tu entorno a la que ves muy sola.


Caminando acompañados hacia una soledad sana

Poniendo salud a los años en los que se envejece

9 testimonios agradecidos de mayores participantes en el taller 'Apendizaje básico y uso del móvil'

Una brújula contra la soledad en los mayores

sábado, 27 de agosto de 2022

CON OTRAS GAFAS / Ocho cortos seleccionados en la III Edición del Festival 'Agarra la Vida'





En unos días llega el mes de septiembre y con él la celebración del Día Mundial para la Prevención del Suicidio que moviliza a los voluntarios del Teléfono de la Esperanza por toda España en actividades de sensibilización sobre la importancia de la prevención para atajar este grave problema de salud mental.
Por tercer año consecutivo ponemos en marcha el certamen de cortos 'Agarra la Vida'. Se han seleccionado ocho creaciones que se podrán ver en el canal en Youtube del Teléfono de la Esperanza entre los días 1 de septiembre y 8 de octubre.

Este es el enlace:

Solo en la II Edición que tuvo lugar en 2021, se recibieron 300 cortos como se puede leer en esta publicación que hicimos entonces:


Acompaña a este post el vídeo de la canción 'Agarrarte a la vida' que Rozalén ha compuesto con gran respeto y sensibilidad para que se conozca el pozo oscuro en el que viven muchas personas y la existencia de redes de apoyo para ayudarles a salir de esa situación. Rozalén, que estudio Psicología, asegura que desde hace tiempo recibe peticiones 
de que escriba sobre el suicidio, pero siempre le ha costado mucho comprenderlo para poder abordarlo en una canción.
Hace unos meses explicó que se lanzó a componer la canción como acompañamiento a una amiga en un proceso vital muy duro contando con el asesoramiento de expertos, psicólogos y antiguos profesores suyos. 
Rozalén ha escrito una gran composición en la que derrocha respeto, evita juicios y ofrece el acompañamiento -aunque no se entienda el dolor del otro- de la persona que se encuentra en el sufrimiento. Bajo el vídeo se puede leer la letra completa.

jueves, 25 de agosto de 2022

Porque soy voluntario del Teléfono de la Esperanza



 

Carlos López

Voluntario del Teléfono de la Esperanza

Mi contacto con el Teléfono fue por una necesidad de ayuda. Lo que más me impresionó fue la disponibilidad de personas que, aunque no sabían quién era yo, ofrecían su tiempo y sus conocimientos a disposición mía.

Me ofrecieron realizar un curso y una vez realizado pregunte ¿cómo puedo pertenecer al Teléfono de la Esperanza? Y sobre esta pregunta desarrollo mi escrito.

Transcurrido un tiempo, me di cuenta de que esta pertenencia a la ONG para ayudar a los demás es un camino de profundización en uno mismo o “el camino de la Individuación, – como explica Jung– es la determinación de vivir tu propia vida, uno debe contar con los errores como parte del proceso; la vida no sería completa sin ellos. No hay garantía –ni por un segundo– que no caigamos en el error o tropecemos pereciendo mortalmente. Podemos pensar que hay un camino seguro. Pero ese sería el camino de la muerte. 

Te apuntas a ayudar a los demás y terminas ayudándote a ti mismo. Es contradictorio pero fácil de entender. El camino es hacia dentro no hacia fuera, ya lo decían los antiguos griegos en El oráculo de Delfos “conócete a ti mismo y conocerás el universo y a los dioses”.

Un puzzle muy complejo

Pero esto, que queda muy bonito de decir, es un puzzle muy complejo con muchas piezas a ordenar y se necesita mucho tiempo y dedicación para poder ver la imagen final. Por lo tanto, con lo primero con que tuve que enfrentarme fue con la pieza del puzzle. Paciencia. En esta vida de inmediatez donde todo es ¡ya!, ¡ahora!, esto de darnos tiempo para nosotros no está de moda y empiezas a ser algo rarito para los demás, ¿este de que va?

Después vienen los autoengaños de la motivación basada en la ayuda a los otros. Me di cuenta que utilizaba los halagos de los demás para rellenar mis huecos vacíos de sentido. En este proceso descubrí que esto es muy normal y me liberé un poco de la culpabilidad por utilización ilícita e inconsciente de los otros. Esta pieza es el proceso de pedir Perdón a los demás y a uno mismo.

El Ego sibilino

Cuando va pasando el tiempo y vas viendo que el puzzle empieza a tener forma, una capa de uno llamada Ego, empieza a coger el control de una forma muy sibilina o misteriosa.

Este es el peor de los procesos, es la pieza de Ser Más. Aquí es donde se cometen los errores más grandes y donde más puedes hacer daño a la organización ya que la ceguera de uno puede poner en peligro el trabajo de muchos.

Si pasado un tiempo y no te has estropeado mucho y, sobre todo, te mantienes con un poquito de visión, la vida te invita a bañarte en la Realidad de la Vida. El resultado de este baño afecta sobre todo a la visión siendo capaz de corregir las miopías.

Cada uno de nosotros ve las cosas de acuerdo a nuestro particular punto de vista, es decir, de acuerdo a lo que hemos vivido, a nuestras experiencias y nuestras heridas, por lo que observamos al mundo de acuerdo a cómo somos, y a veces creemos que es la única manera de ver las cosas. Desde este punto de vista sólo vemos lo que creemos que es, se trata de nosotros mismos y tiene que ver con nuestros sentimientos y emociones. Es desde aquí que tendemos a juzgar. Y es ahí donde surgen los conflictos, tanto internos, como externos.

 

La humildad nos protege

Así que, finalizado el baño y limpiado las impurezas lo recomendable, para que no vuelva a sucederte es aplicarse una buena capa de crema protectora de Humildad, que nos previenen de las influencias del Ego.

Para completar el proceso aplica la frase de Albert Einstein No podemos resolver problemas con la misma mentalidad con la cual fueron creados. Si realmente queremos ayudar a los demás es necesario ordenar el puzzle que somos. Tenemos que tomar control de nosotros mismos, a ser conscientes, a despertar. Debemos empezar por observar que cada una de nuestras piezas o de nuestros defectos nos limitan, nos controlan y lo seguirán haciendo, hasta que decidamos impedírselo, hasta que los eliminemos uno por uno. Para lograrlo, debemos desarrollar la atencion y la introspección, descubriendo en cada momento, que defecto es para terminar actuando, ¿por qué y para que hago lo que hago?

Observación y aceptación

Estos dos procesos se centran en la observación y aceptación de todo lo que me llega a la mente, tanto sean pensamientos y emociones como sensaciones o sonidos, sin juicios de valor, en lugar de tratar de cambiarlos, desplazarlos fuera de la conciencia o ignorarlos. Todo ello conduce a un mayor bienestar, serenidad y creatividad, haciéndonos más capaces de afrontar la ansiedad, las emociones negativas y el dolor.

La respuesta a la pregunta inicial del por qué soy voluntario, me lo ha dado la experiencia del proceso. El descubrimiento de las heridas o piezas del puzzle que estaban mal organizadas y la necesidad de ser ordenadas, creo que es la única forma de poder ver al otro y eso solo se consigue cuando tú ya te has podido ver. Es poner al servicio del otro ese trabajo en uno mismo.

 

sábado, 20 de agosto de 2022

CON OTRAS GAFAS / Reconocimiento a los voluntarios de respuesta rápida


                             Voluntarios en la jornada de febrero pasado. Foto: La Opinión de Málaga
 

La Agrupación de Desarrollo de Voluntarios de Respuesta Rápida de Málaga es una de las entidades reconocidas por el Ayuntamiento de la ciudad en los Premios Ciudad de Málaga 2022 que se han anunciado esta semana. La agrupación se puso en marcha en febrero de 2021, en plena pandemia, para dar una respuesta lo más inmediata posible a situaciones o eventos no previstos que se producen y afectan a la población. La crisis del coronavirus inspiró su puesta en marcha. La guerra de Ucrania, con la demanda de ayuda  a la población de ese país, le fortaleció un año después al engrasar el trabajo en red de un buen número de asociaciones que activaron una campaña de recogida de alimentos.

El pasado mes de febrero tuvo lugar una  jornada de formación a la que asistieron 120 voluntarios intercambiando sus experiencias y participando en un espacio formativo centrado en los primeros auxilios. Asistieron el alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre, y la concejala de Participación Ciudadana, Ruth Sarabia.

Una de las ventajas de esta importante red de voluntariado es su presencia extendida por el territorio urbano malagueño, ya que cuenta con asociaciones agrupadads en Churriana, La Palmilla, Lagunillas, Ciudad Jardín y El Palo, entre otras zona de la ciudad. Además también se agrupan en ella colectivos culturales y de mujeres. Otros objetivos de la agrupación son impulsar acciones de sensibilización, prevención y promoción del voluntariado, coordinar recursos de prevención, protección y promoción, eventos  y celebraciones y hacer propuestas y planificación de acciones en materia de voluntariado y apoyo a las ONGs que trabajamos en Málaga.


Leer más:

Los galardones se entregarán en una ceremonia que tendrá lugar el próximo 23 de septiembre



jueves, 18 de agosto de 2022

Cuando cambias tus creencias cambias tus emociones


                                                           Foto: www.residenciatura.org


Ana Laxmi Thakurdas 

Voluntaria del Teléfono de la Esperanza

Las vidas de las personas están jalonadas de acontecimientos o estímulos que nos condicionan en mayor o menor medida. Podemos decir que la vida es lo que nos sucede y como reaccionamos. Esto último va a depender de una serie de factores que analizo a continuación.

Un mismo acontecimento se evalúa de forma distinta según nuestras creencias, es decir, a qué o quién atribuimos lo que ha ocurrido. Si creemos que la responsabilidad es totalmente nuestra o que hay causas que se escapan a nuestro control, si pensamos que es temporal y afecta solo a un área de nuestra vida o por el contrario eterno y que inunda toda nuestra existencia, así será la reacción emocional que determinará nuestro comportamiento y bienestar. Veámoslo con un ejemplo.

Os presento a Miriam y Celia, dos amigas que se quedaron sin trabajo por la crisis Covid y llevan un tiempo buscando reincorporarse al mercado laboral sin mucho éxito.

Para conocerlas mejor vamos a meternos en sus cabezas.

MIRIAM se siente satisfecha con la labor que hizo en su último trabajo y sabe que, aunque tiene limitaciones, es capaz de aprender para adaptarse a un nuevo entorno laboral sin perder de vista su sentido de vida que es disfrutar al máximo cada experiencia dejando todo mejor de lo que lo encontró. Tras una entrevista no la contratan y piensa lo siguiente:


CELIA sabe que estuvo bien valorada en la última empresa que trabajó y hasta obtuvo un puesto de responsabilidad, aunque piensa que el factor suerte tuvo un gran peso y además si la incluyeron en el ERE fue porque se dieron cuenta que no sabía tanto como parecía. Sus resultados comparados con los de los compañeros seguramente serían inferiores. Tampoco la contratan tras una entrevista y éstos son sus pensamientos:



¿Quién crees tú que encontrará trabajo antes? ¿Quién será más feliz en el proceso de búsqueda?. 

Analicemos sus pensamientos haciéndonos dos preguntas:

1)¿Cómo llegan a una situación difícil?

Una manera  de ir a buscar empleo es con sensación de autoeficacia, motivación y expectativas positivas. La vida es un reto y tienes actitud de logro porque aprendes del fracaso y te esfuerzas. Lo importante no es el resultado sino el crecimiento de uno mismo.

Otra manera es con sensación de incapacidad, miedo e inseguridad. Entonces la vida se llena de obstáculos que nunca se superan con el mejor resultado y como la suerte no acompaña apenas te esfuerzas pues es en vano. Aquí importan más los resultados normalmente valorados por otros o por uno mismo al compararse.

2)¿Cómo abordamos una situación difícil?

Aquí debemos fijarnos en la atribución que hacemos de lo ocurrido. Nuestra reacción será negativa si creemos que el hecho de que no nos hayan contratado es por las siguientes causas:

Internas….”soy insegura y nerviosa”

Estables…..”nací así y no lo puedo cambiar”

Globales….”cualquier cosa que hago me pasa lo mismo””

Esta reacción negativa nos hace entrar en una espiral descendente de emociones que nos llevan del pesimismo a la culpa, los celos, el victimismo y la depresión. El destino de esta espiral es la DEPRESIÓN caracterizada por una actitud defensiva ante las circunstancias.

Sin embargo también lo podemos atribuir a las siguientes causas:

Externas….”las empresas no tienen presupuesto para contratar por la crisis Covid”

Inestables….”ese día fui nerviosa porque dormí mal, Específicas….”en la entrevista preguntaron por un tema que no controlo pero sé resolver bien otros muchos”

La reacción positiva también nos arrastra inconscientemente a una espiral esta vez ascedente de alegría, confianza, pasión, esperanza y satisfacción. El destino aquí es la RESILIENCIA a la que se llega con actitud de crecimiento.

El autoconocimiento nos hace conscientes de esas creencias que evalúan los hechos de forma automática. El lenguaje también determina la forma en que pensamos, por eso es importante hablarnos bien y cambiar creencias que nos llevan a emociones desagradables.

Lo mejor de todo es que la Resiliencia se entrena y gracias a la constancia y la plasticidad cerebral crearemos nuevas creencias que con el tiempo se volverán automáticas.

En cada ocasión tú decides si subes o bajas.

martes, 16 de agosto de 2022

Testimonio online 'Abrazando mi TOC' de un joven con alta terapéutica total

 


La Asociación TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo) de Málaga con la que el Teléfono de la Esperanza mantiene un acuerdo de colaboración nos comunica la realización de varias actividades que tendrán lugar en las próximas semanas. 

Sábado 27 de agosto: Luis Diego Castro, paciente con alta terapéutica total compartirá su testimonio 'Abrazando mi TOC' a través de Google Meets.

Hora: España 5PM  - Costa Rica 9 AM


Por otra parte, la asociación ha anunciado que el 25 de septiembre llevará a cabo el sorteo de la guía 'Aprender a vivir con el TOC' entre los familiares de las personas afectadas.




sábado, 13 de agosto de 2022

CON OTRAS GAFAS / Solidaridad después de una lesión medular

 

                                Rocío y los cuatro nadadores que la apoyan. Foto: Málaga Hoy


Rocío Martín es una joven malagueña que llevaba una vida normal hasta el 14 de julio de 2021. Ese día se sintió mal mientras estaba en su puesto de trabajo en una gasolinera de Alhaurín el Grande. Acudió a urgencias donde le diagnosticaron que sufría ansiedad, pero de vuelta a su casa descubrió que no podía ir al servicio por lo que fue a urgencias del Hospital Clínico Universitario de Málaga. Le hicieron diferentes pruebas, espero varias horas los resultados y finalmente le comunicaron que había sufrido un infarto medular. Permaneció tres días en la unidad especializada en ictus.

Días después Rocío fue trasladada al Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo donde ha permanecido ocho meses luchando, trabajando y adaptándose a una vida marcada por la movilidad muy limitada. Sus músculos, desde el abdomen a los pies, no le responden. Toda su horizonte vital ha quedado condicionado por la lesión medular. Ella y su marido tienen que hacer frente a importantes obras de adaptación de su casa como instalar un ascensor y adquirir un vehículo adaptado para desplazarse. El presupuesto total alcanzaba los 25.000 euros, pero Grupo Badía, la empresa para la que trabajaba, se ha hecho cargo de la parte mayor de los costes, los 20.000 euros de instalación del ascensor.

Rocío empezó a vender pulseras y a difundir su necesidad de conseguir fondos captando el apoyo de cinco jóvenes malagueños que al conocer sus necesidades se han volcado en iniciativas como vender camisetas, convocar una cena benéfica el próximo mes de septiembre y atravesar el Estrecho de Gibraltar a nado para fomentar la visibilidad de la campaña. David García, Daniel García, Cristian Palos y Alberto Morales han impulsado una hermosa ola de solidaridad que les llevará sobre las aguas hasta la costa marroquí. La cresta de la espuma llevará el nombre de Rocío en volandas

Además del apoyo de Grupo Badía se ha conseguido el de otras seis empresas que han hecho donaciones para que Rocío cuente con una motocicleta adaptada, lo que le permitiría desplazarse con normalidad y ganar en calidad de vida. La ola de solidaridad puesta en marcha por Rocío y los nadadores crece y no se detiene. Un ejemplo de empatía hacia una mujer que ha visto como su movilidad de persona joven quedó truncada un mal día de julio de 2021.


Leer más:

Cuatro malagueños cruzarán el Estrecho de Gibraltar a nado para ayudar a la joven que sufrió un infarto medular



jueves, 11 de agosto de 2022

Enfermedad en la vejez y su entorno cercano

 

                                           http://enfermedadealzheimer.blogspot.com/



José Miguel Arocena

Voluntario del Teléfono de la Esperanza

En el artículo anterior, establecía alguna de las características en las que se sustenta tanto el concepto de enfermedad  como su vivencia.  Cuales eran las sensaciones y cual era también el rasgo que a esas sensaciones le conferían ese particular carácter que diferencia la enfermedad de otras situaciones más o menos parecidas pero que no lo son. Y también a modo de resumen y escueta concreción, de cómo el ser conscientes de la cercanía y la presencia de esta en nuestras vidas, podía también ayudarnos, sin miedos y con confianza, a gestionar su presencia y a vivir de otro modo su encuentro.

Pero si sabemos de algún periodo de nuestras vidas donde esto se pone en evidencia de una manera absoluta y sin retorno, ese es el de la vejez. El paso del tiempo expresado sin florituras ni adornos, en estado puro y con toda su carga. Un periodo que afecta al propio individuo a la vez que envuelve y lo conecta con las personas de su entorno.

Este periodo de la vida es de una intensidad emocional y de aprendizaje realmente notables porque a las características ya conocidas de dependencia, fragilidad, limitaciones, dolor, pérdida de la intimidad, miedos diversos, frustración etc, se le unen otras no menos importantes.

Se pueden mencionar muchas pero me centrare en solo dos o tres.

La vivencia del tiempo

Observar cómo los periodos de tiempo en los que normalmente ocurren las cosas se ven alterados. Asistimos a grandes cambios en espacios relativamente muy cortos de tiempo y con frecuencia sin retorno. Que exigen un gran esfuerzo de adaptación al que lo sufre pero que simultáneamente plantean  dificultades de aceptación y de adaptación también  a las personas que constituyen el entorno. Algo que nos habla de la fragilidad pero también de la resiliencia, de la capacidad de adaptación de la aceptación.

Paralelamente se agranda el papel de actores que podrían estar “dormidos”. Y hablo de la importancia y del valor de los apoyos sociales tanto por parte de los poderes públicos (Ley de Dependencia) como de otros. Aunque en mi caso, uno de esos grandes valores emergentes que me han parecido decisivos y muy importantes, son la figura de los hermanos. Personas que han compartido un mismo espacio físico y afectivo pero que casi en su totalidad lo han hecho con experiencias y vivencias diferentes entre ellos. Personas con puntos de vista diferentes en un momento tan sensible, obligadas a confluir en la toma de  decisiones, algunas  muy complejas y dolorosas, que a veces inciden sobre  la propia autonomía y soberanía de la persona a la que se está tratando de cuidar.

¿Cómo se gestiona por parte de estos actores, los sentimientos de culpa, las “cuentas pendientes” no resueltas, etc  que cada uno de ellos arrastra en sus vidas? Porque aunque se esté actuando  sobre el mismo ser, muy probablemente no se está ayudando a la misma “persona”. Y este proceso sin la armonía y el entendimiento necesarios y deseables, viene a añadir más confusión y más dolor a lo que de por sí ya lleva mucho de esto. Y a la inversa cuando el entendimiento, la escucha la generosidad, la renuncia etc, fluyen, se facilita y hace fluido todo este difícil tiempo.

Pero este tiempo es fundamentalmente una experiencia vital. Algo que tenemos que vivir cada uno y que es distinto de unos a otros.

La importante cercanía física

Perdí a mi madre hace ahora cuatro meses y medio. Los últimos tiempos, los largos últimos tiempos que la he tenido cerca, físicamente cerca, han sido muy importantes para mí. He llegado a la conclusión de que ella, que me dio la vida al nacer, en realidad e incluso con su marcha nunca ha dejado de dármela.  Con una madre, solo se convive en clave de vida, como una especie de nacimiento permanente y continuo. Las circunstancias externas y también las internas de las que inevitablemente estas rodeado, tan son solo parte de un escenario. Algo así como el cauce de un rio  cuya única posibilidad es la de abandonarse y dejarse arrastrar por ese ímpetu, por esa “clase práctica de vida” que es una madre.

Agradecimiento, vida y amor

Durante sus últimas etapas, su capacidad comprensiva así como el soporte verbal que tenía, apenas daba para repetir hasta el infinito, dos o tres ideas. Pero eso tampoco fue un obstáculo. Al fin y al cabo ella supo comunicarse conmigo cuando me alumbro y yo era incapaz de articular palabra alguna. El círculo de la vida me retrotraía a mis inicios. Pero a la inversa. Y me abrí y descubrí su fina y delicada piel a la que acaricié incansable agradeciendo que me envolviera con ese impagable regalo. E incorpore a mi paisaje diario sus silencios, sus periodos de ausencia, sus miedos (y los míos), como el pan nuestro de cada día que aquel árbol tan lleno de vida me daba y me estimulaba bajo su fresca sombra para seguir buscando sin límites. En mi encuentro con ella me había quedado sin la palabra pero había redescubierto su piel, su olor, el calor de sus gastadas manos, su belleza contraída. Y agradecía a diario que estuviera ahí. Porque entre la enfermedad y la vejez tenemos un inimaginable mundo por descubrir, nuevo, cambiante pero a la vez, sencillo y acogedor. Donde solo hay presente, agradecimiento, vida y amor.  La vivencia de este periodo con la atención y la escucha que merece es una lección de vida. Y solo tenemos que estar atentos y en disposición de recibir ese regalo. Abandonar nuestras resistencias y nuestras estrecheces. Vivir la plenitud del momento desde la confianza plena hacia lo que allí esta ocurriendo. Sentir cada encuentro en clave de compasión (es decir al mismo paso, al compás como dicen los flamencos). Y finalmente dar espacio para que la última palabra sea simplemente ¡!gracias!!, ¡!te quiero!!.

   

martes, 9 de agosto de 2022

Calendario de cursos y talleres para septiembre, octubre y noviembre

 



El Teléfono de la Esperanza ha programado un completo calendario de cursos y talleres para los meses de septiembre, octubre y noviembre. En la imagen puedes ver la fecha de inicio de cada uno de ellos y el título. 

Si quieres más información llámanos al teléfono 952 65 26 51 

También puedes entrar a la web y conocer algunos aspectos más sobre cada uno de esos ciclos de formación en salud emocional. 

Poe otra parte, el 22 de septiembre retomaremos los talleres enfocados a evitar la soledad y el aislamiento de las personas mayores que forman parte del programa 'La Brújula de la Esperanza'

https://telefonodelaesperanza.org/malaga/agenda-cursos-y-talleres





Si te interesa un curso o taller, inscríbete ya y no lo dejes para más adelante


Conoce aquí los testimonios de mayores que participaron en actividades de 'La Brújula de la Esperanza' 



sábado, 6 de agosto de 2022

CON OTRAS GAFAS / Un avance científico que inyecta esperanza de vida

 

                      El paciente, en el centro, rodeado de sanitarios. Foto: Málaga Hoy


Bomba de asistencia circulatoria mecánica. Así se llama el dispositivo que un equipo médico del Hospital Clínico Universitario de Málaga ha implantado a un paciente con una baja esperanza de vida. A sus 67 años, el hombre que ha sido intervenido padece una miocardiopatía de origen genético que le impide llevar una vida normal. Durante doce años los especialistas en insuficiencia cardíaca del hospital malagueño hicieron seguimiento de la evolución de esta persona y agotaron diversas opciones terapéuticas.

Finalmente el pasado mes de junio se llevo a cabo la intervención quirúrgica en la que se le implantó lo que comunmente se llama un corazón artificial.

El jefe del servicio de Cardiología del complejo hospitalario universitario 'Virgen de la Victoria', Juan José Gómez Doblas, ha explicado que "técnicamente se trata de implantar una bomba centrífuga que conecta el corazón con la arteria aorta y que se dispone dentro del tórax. El dispositivo funciona mediante unas baterías que suministran la energía necesaria para extraer la sangre del ventrículo izquierdo  y eyectarla en la aorta ascendente, desde donde se distribuye a todo el organismo".

Ainhoa Robles, miembro del equipo de Cardiología, ha destacado que la novedad de esta operación radica en que es una terapia definitiva para el paciente facilitándole una mejora clínica y poder llevar una vida normal.

Se trata de la primera intervención de este tipo que se lleva a cabo en la provincia de Málaga, lo que traslada un mensaje de esperanza para otras personas que están viviendo con la misma dolencia cardíaca y las incertidumbres que se generan en sus vidas.


Leer más:

El Clínico implanta con éxito un corazón artificial a un hombre de 67 años en Málaga

jueves, 4 de agosto de 2022

Vivir cuando llega la enfermedad

 

                                                          www.diariomedico.com



José Miguel Arocena

Voluntario del Teléfono de la Esperanza


Para no “profesionalizar” el termino enfermedad, es decir, no asociarlo a un aspecto netamente médico o sanitario, podríamos comenzar acercándonos a la etimología del vocablo en cuestión.

La palabra enfermedad proviene del latín, del término infírmitas que aludiría a la pérdida de la firmeza, al abandono y ausencia de la “solidez”, puede que además también al abandono de la seguridad o quizás también a la pérdida del equilibrio funcional tanto físico como espiritual y relacional que en situación de normalidad preside nuestras vidas.

Todos los que hemos padecido períodos de semejante intensidad en algún momento de nuestra vida, sabemos de qué estamos hablando. De qué manera y con qué intensidad, en ese periodo se diluyen tanto los vínculos y las maneras de entendernos y de “convivir” con nosotros mismos como los anclajes y las extensiones que nos ayudan a relacionarnos con todo aquello que nos rodea y que de una u otra manera también nos ayudan a tener una u otra referencia de ese yo mío.

Cuando sobreviene un escenario de esta naturaleza, además de tener la convicción de que siempre ocurre en el “momento más inoportuno”, de que casi nunca nos sentimos suficientemente preparados para gestionarlo, con frecuencia lo interpretamos como un “oscuro e indeseable “paréntesis” por el que estamos obligados a transitar. Un árido e incierto desierto que, si la ciencia y la fortuna no lo remedian, tendremos difícil atravesarlo para finalmente alcanzar, esa deseada “otra orilla” como si de una mítica laguna Estigia se tratara y  que sería la “salud”. Aunque siempre sea, ayudados por ese Caronte, nuestro barquero interior, al que pagaríamos sus servicios, entregándole nuestro entusiasmo, nuestros proyectos, nuestra confianza y nuestras energías.  Es decir, desprendiéndonos de todo lo  valioso en lo que nos apoyamos y funcionamos en el día a día existencial y que sin lo cual nos encontramos tan en carencia, en vacío, desasistidos .

¿Por qué a mí?

Preguntas que nos surgen como son, ¿por qué a mí?, ¿qué he hecho mal para llegar hasta aquí? etc, ya nos ponen en la pista de unos de los soportes que a nivel de creencia conceptúan el hecho de la enfermedad. Que no es otra que entender que cualquier alteración de lo que entendemos como salud, bienestar, normalidad, es siempre algo ajeno y por tanto externo a nosotros. Algo así como una emboscada del destino.

Y a continuación la primera actitud común a cualquier duelo. La rebelión, la no aceptación. Olvidándonos, que la enfermedad es solamente la otra cara de la misma moneda a la que denominamos vida. Que la una no se comprende sin la otra. Y que incluso más aun, la una explica y le da sentido y potencia a la otra. Aunque esta sea una cara diferente, menos amable y denostada y que nos sitúa en la tesitura de vernos obligados a “tirar” de todo lo valioso que hemos ido aprendiendo y acumulando con el paso del tiempo.

Por todo ello podríamos preguntarnos, ¿es la enfermedad algo externo al individuo o simplemente inherente a él? Porque en función de la respuesta que nos diéramos, deberíamos tener una actuación u otra. Si la enfermedad es tan mía como puede ser el amor, la compañía, la paz etc, estaríamos en disposición de creer que aceptarla y vivirla formarían parte de los elementos que nos ayudarían a construir nuestro edificio psicoafectivo, nuestro proceso madurativo e incluso relacional. Todo ello en lo que a aprendizaje se refiere.

Vivir la enfermedad

¿Tengo derecho a vivir en profundidad mi periodo de enfermo? Y curiosamente en este sentido, las normas reguladoras en cuanto al derecho de los pacientes se refiere, se adelantaron a la respuesta, proclamando como no podía ser de otro modo, que sí y declarando que todo paciente tiene la posibilidad de aceptar o no las medidas terapéuticas propuestas y por tanto de transitar sea por el camino propuesto o el elegido por él. En suma, descubrir que cada uno es de hecho y por derecho, un agente fundamental en el mantenimiento y/o restitución de su salud perdida.

Y para terminar. Si aceptamos que la enfermedad es carencia, sensación de vulnerabilidad, dependencia, separación, dudas, incapacidad, derrumbe etc, podríamos preguntarnos, ¿porqué cuando nos sentimos enfermos experimentamos todas o algunas de estas sensaciones?

Hay otras situaciones en la vida como una separación afectiva o la pérdida del trabajo o un negocio en las que experimentamos esas mismas sensaciones. ¿Por qué en esas circunstancias no nos sentimos enfermos? ¿Qué es lo que identifica un periodo como de enfermedad frente a otro que no lo es? Porque quizás, lo que de verdad se subraya en estas circunstancias, sea experimentar nuestra finitud, el límite, el riesgo de desaparición, nuestro carácter contingente. En resumen, no somos imprescindibles para que el  mundo siga funcionando. Estamos de paso por él.

Puede parecer una paradoja pero en este punto radica la primera de nuestras fortalezas por medio de la cual tratar de afrontar un periodo tan sensible pero a la vez tan personal, como es este de la enfermedad. Porque, si bien es cierto que estos momentos nos posicionan frente a aspectos y lugares propios que no queremos ver, también es cierto que el aprendizaje, la escucha, la introspección, el autoconocimiento y la aceptación finales, nos ayudaran a vivir con la confianza necesaria y a extraer en este tránsito, su riqueza implícita. Experiencia de la que saldremos fortalecidos y que mejorará tanto nuestra visión personal como externa.  

 


miércoles, 3 de agosto de 2022

Calendario de artículos de salud emocional para el mes de agosto

 


'El tiempo de la esperanza', el blog del Teléfono de la Esperanza de Málaga, continua durante el mes de agosto con la publicación de artículos relacionados con la salud emocional elaborados por nuestros voluntarios. 
Después de los publicados en el mes de julio, estos son lo que aparecerán en este espacio todos los jueves de este mes y el primer jueves de septiembre.                                               
4 de agosto. ¿Por qué a mi? o ¿Qué he hecho para llegar hasta aquí? son algunas preguntas que nos podemos plantear cuando una enfermedad entra en nuestras vidas. José Miguel Arocena analiza las reacciones habituales, las incógnitas que se nos vienen a la cabeza y ofrece pistas sobre la aceptación sana de un periodo que puede entrar en la vida de cualquier persona. También la enfermedad, con todas sus incertidumbres y sensación de parón o interrupción inesperada de la vida cotidiana puede enriquecernos.

11 de agosto. José Miguel Arocena vuelve a analizar lo que la enfermedad supone para la vida de las personas, centrándose en los de mayor edad. Vejez y enfermedad son una fuente de emociones intensas y de cambios en periodos de tiempo cortos. Las personas se sienten frágiles, doloridas, angustiadas y también pierden intimidad, pero entran en juego los apoyos familiares y sociales que sirven para convivir de otra manera. Es una experiencia vital que cada uno la vive de una manera.

18 de agosto. Ana Laxmi Thakurdas plantea como los acontecimientos de la vida afectan a las personas según sus creencias, la evaluación de la situación concreta y la emoción que sienten a partir de esa última acción. 'La vida es 10% lo que sucede y 90% como reaccionas' titula su artículo exponiendo un ejemplo de las posibles reacciones de dos mujeres ante la situación de estar sin trabajo.

25 de agosto. Carlos López, uno de los voluntarios más veteranos de la sede de Málaga, nos cuenta como fue su acercamiento a la asociación y porque decidió dedicarse a este voluntariado. 'Te apuntas a ayudar a los demás y acabas ayudándote a ti mismo', explica Carlos de forma muy gráfica como es la relación de ayuda en el Teléfono de la Esperanza; un proceso individual de autoconocimiento y crecimiento personal.

1 de septiembre. Francisco García dedicará su colaboración a explicar como han sido los primeros meses del proyecto 'El Chat de la Esperanza', el canal de ayuda a jóvenes y adolescentes que el Teléfono de la Esperanza abrió el pasado mes de marzo en WhatsApp y que está teniendo una gran acogida.