martes, 29 de junio de 2021

Verano 2021. Nuestros voluntarios escriben sobre salud emocional y mental



'El tiempo de la esperanza', el blog que el Teléfono de la Esperanza de Málaga publica en la red desde agosto de 2009, adapta sus contenidos al verano. Entramos en un tiempo para descansar, tener más espacios para la familia y amigos y para uno mismo. El ocio y la diversión invitan a fluir, a vivir la vida y también se aben espacios para la reflexión y el crecimiento personal.
Un grupo de voluntarios de nuestra asociación traerán aquí recomendaciones para conocernos mejor, vivir más equilibradamente y abordar situaciones difíciles en nuestras vidas. Todo esto adquiere especial relevancia en esta etapa avanzada de la crisis en la que la situación sanitaria ha mejorado, pero la incertidumbre sigue muy presente. Muchas personas viven preocupadas por su situación laboral y económica. Otras han perdido a familiares o amigos y hay quien arrastra secuelas psicológicas por la crisis vivida. Es un buen momento para aprender a cuidar de nuestra salud mental.

Estos son los posts sobre salud emocional y mental que se publicarán en el mes de julio:

1 de julio. 'Silencio, escucha y acompañamiento. Elementos de sanación'. José Miguel Arocena ha desarrollado su carrera profesional como médico especializado en Anestesiología, Tratamiento del Dolor y Reanimación. Ahora es voluntario en el departamento de Orientación. En este artículo plantea interesantes pautas para el autonocimiento y la búsqueda del equilibrio emocional.

8 de julio. 'Una brújula para vivir con esperanza'. Pepe Ruz nos contará su experiencia junto a otros muchos voluntarios atendiendo a los mayores en el novedoso programa 'La Brújula de la Esperanza', que hemos puesto en marcha para paliar la soledad y el riesgo de aislamiento de los mayores malagueños. 

15 de julio. 'Beneficios de la meditación en la vida diaria'. 

Mamen de la Torre dedica su colaboración a la meditación. Nos explicará como se hace y lo que nos puede aportar. La meditación anclada a nuestra rutina diaria se convierte en un camino de transformación corporal, mental y espiritual. 


22 de julio. 'La casualidad no existe. Mi año de pandemia como orientador del Teléfono de la Esperanza'. Paco García, uno de los orientadores más veteranos de nuestra asociación, traza un retrato muy personal del tiempo de pandemia con episodios personales de dolor personal y satisfacciones por la ayuda que ha prestado a llamantes en situaciones críticas. Ha tenido la suerte de enseñar y aprender junto a las alumnas del Practicum de la Facultad de Psicología que han estado con nosotras desde octubre.

29 de julio. 'Actitud ante el duelo y beneficios del perdón'.
José Portillo escribe sobre el  duelo, que puede ser por la muerte de un ser querido o por otros momentos de ruptura o pérdida en la vida. Explica como es el proceso hasta poder superarlo y las formas de afrontarlo.

viernes, 25 de junio de 2021

El Teléfono de la Esperanza colabora con Sperantia, la app de atención psicológica gratuita desarrollada por la Universidad Pontificia de Comillas




El Teléfono de la Esperanza está colaborando con el servicio que presta la aplicación Sperantia desarrollada por la Universidad Pontificia de Comillas para ofrecer gratuitamente una asistencia psicológica personalizada y digitalizada. 
El pasado 1 de junio se firmó un acuerdo de colaboración entre esta universidad de los jesuitas, Cruz Roja, La Caixa y el Teléfono de la Esperanza. Los usuarios de la app acceden a una herramienta para el autoconocimiento, la orientación psicológica personalizada y la derivación, cuando sea necesario, a la ayuda profesional.
La idea del proyecto surgió por la necesidad de dar cobertura en salud emocional a importantes sectores de la población afectados por la crisis sanitaria y económica y las limitaciones de recursos de salud mental que existen en la sanidad pública. Sperantia se enfoca a los menores, personas en duelo, sanitarios y a los adultos en general.
En la presentación pública de este importante y novedoso proyecto Lucía Halty, profesora de Psicología en la Facultad de Ciencias Humanas y Sociales de la Universidad de Comillas explicó que "la iniciativa nace hace un año para ayudar a la gente confinada y la forma de hacerlo es a través de la tecnología, diseñando un formulario para hacer perfiles de personalidad y enviar recomendaciones automáticas y personalizadas ajustadas a cada sujeto en particular".
José Miguel García, director de proyectos del Teléfono de la Esperanza, indicó que "la app nos permitirá dar soporte a personal especialista que trabaja con intervención directa y podemos hacer filtrados con más garantías".


martes, 22 de junio de 2021

Lo que aceptas te transforma



 

La ACEPTOMICINA es el remedio infalible para desarrollar amor hacia uno mismo. Esta medicina sana, no tiene contraindicaciones y sus efectos curativos son innumerables.

Uno de sus efectos más inmediatos es liberar la actitud amorosa hacia nosotros y hacia los demás, convirtiéndonos en personas más auténticas, amables, alegres, integras y sabias. Este remedio nos permite liberarnos del esfuerzo de seguir aparentando ser alguien que no somos, utilizando las máscaras de mil colores que no engañan a nadie y nos deja libres para cumplir con el más importante propósito de nuestra vida, descubrir nuestra verdadera naturaleza interna y ser nosotros mismos, dejando brillar nuestras cualidades y acogiendo nuestros límites. Tal como somos, está bien.

Otro de los efectos de la ACEPTOMICINA es que potencia la visión de la realidad, nos permite ver lo mejor y más positivo de cada situación o circunstancia y aceptarla tal como viene, ya que no son las situaciones las que nos alegran o derrotan sino nuestra visión de ellas.

Además reactiva nuestra capacidad de acogerla y elegir en cada momento como queremos vivirlo y que decisiones son las que podemos tomar para sentirnos más vivos y llenos de energía. El remedio potencia la fortaleza interior que nos permite asumir nuestra responsabilidad, requisito imprescindible para atrevernos a ser y desarrollar nuestra confianza. Cada uno somos responsables de lo que decimos, hacemos y vivimos, así que al responsabilizarnos de lo nuestro, nos damos la oportunidad de cambiar lo que no queremos que esté en nuestra vida y elegir vivir más en consonancia con nuestro verdadero yo. A veces también resulta complicado aceptar nuestras emociones y luchamos contra ellas quedando desgastados y desenergetizados.

La ACEPTOMICINA nos permite redescubrir nuestra forma de sentir transitando desde el sentir aprendido al sentir auténtico y nos permite conectar con la vida que nos corre por dentro, ampliando la visión de nosotros mismos y proporcionándonos la sintonía necesaria para mantener nuestro equilibrio emocional.

Una dosis de ACEPTOMICINA diaria, nos ayuda a recuperar nuestro poder, trascender nuestros autoengaños, liberarnos de nuestros condicionamientos limitadores, apropiarnos de nuestra realidad, dar en cada momento lo mejor de nosotros mismos ante los desafíos más difíciles y nos deja libres para ser los auténticos artífices y protagonistas  de nuestra vida.

¡TOMA ACEPTOMICINA TODOS LOS DÍAS!


sábado, 19 de junio de 2021

Alumnos de Psicología en prácticas conocen el trabajo del grupo 'Ayuda Mutua' de familiares de suicidas

 


Un grupo de 17 alumnos de la Facultad de Psicología de la Universidad de Málaga ha hecho prácticas desde octubre de 2020 en el Teléfono de la Esperanza. Como ya publicamos, gracias a la formación que le han dado nuestros voluntarios han descubierto la Psicología Positiva y la escucha activa. Hoy seguimos trasladando sus impresiones después de ocho meses de prácticas. El modelo de Psicología que se trabaja en el Teléfono de la Esperanza les sorprende a todos por ser diferente y novedoso respecto a los conocimientos que les transmiten en la Facultad de Psicología.

Laura es una de esas alumnas. Asegura que sus modelos de terapia son la activación conductual y la ACT. Asegura que había tenido contacto con la Psicología Positiva colaborando con la Asociación Española contra el Cáncer donde también se utiliza nuestro modelo. “Es un modelo que choca con mis valores, no me termina de convencer, pero me considero una persona con espíritu crítico, me gusta cuestionarlo todo y la formación que he tenido aquí me ha servido porque tocaba mis valores y principios y me ha enriquecido”, explica Laura. Esta estudiante en prácticas ha percibido que "hay llamantes habituales que solo quieren que les escuchen porque están solos y cuando les atienden se sienten personalmente contentos y satisfechos. El proceso es bastante eficaz y está bien organizado”.

La actividad preventiva o paliativa con personas que están en riesgo de suicidio o que han sufrido el de una persona cercana es otro de los descubrimientos de estos alumnos. “En cuatro años en la Facultad de Psicología  no vemos nada sobre el suicidio”, cuenta Marta. Y eso que en España se quitan la vida cada año el triple de personas que las que mueren en los accidentes de tráfico. En ese punto, Luisa valora que “me gustó mucho la experiencia y la participación de las personas en el Taller ‘Ayuda Mutua’. Muchos contaron sus casos y se les habló de la importancia de los hábitos saludables”.

Estefanía destaca especialmente su participación junto a Estefanía en ‘Ayuda Mutua’. “Se hizo de forma muy dinámica, hicimos preguntas sencillas y la gente participó muchísimo. Nosotras nos relajamos, nos sentimos más responsables y al final todo el mundo se fue con una sonrisa”.

Cristina comenta que “había que actuar como psicólogas y la experiencia así fue muy práctica”. Esta participante en el Practicum considera importante todo el aprendizaje que ha hecho entre los voluntarios del Teléfono de la Esperanza donde observa que “saben hacer muy bien su trabajo aunque no son expertos” y destaca la importancia de atender a las personas en este tiempo de pandemia. “Las personas se sienten solas y es fácil contactar con los voluntarios. Es muy importante la labor que hacen”. También saca conclusiones positivas sobre el proceso de formación que en gran parte ha sido online debido a la crisis. “La planificación ha sido difícil y creo que lo hemos llevado bien. Ha sido bueno para mi crecimiento personal”.

A diferencia de los de otros años, los alumnos Practicum apenas han tenido contacto presencial entre ellos. Algunos han desarrollado todo el proceso online y a distancia. Este es el caso de Pablo, residente en Oslo. Así resume su periodo de prácticas: “Tenía una idea preconcebida, pensaba que atendían crisis urgentes y he descubierto el valor que tienen desarrollando mucha más actividad. Yo llamaría si tuviera algún problema y lo recomendaría. Me gustaría hacer coescucha si vuelvo de Oslo”.

Otro de los aspectos positivos que se llevan de esta formación de cara al inicio de sus trayectorias profesionales como psicólogos es el enfoque práctico, vivencial y la oportunidad de conocerse más a si mismos. Estefanía recuerda que el Taller de Gestión Emocional y Mindfulness “me ha ayudado a conocerme más y a mirarme de forma más introspectiva".


miércoles, 16 de junio de 2021

Universitarios en prácticas descubren la Psicología Positiva y la escucha activa en el Teléfono de la Esperanza




Un grupo de 17 alumnos de Psicología de la Universidad de Málaga nos eligió este curso para hacer sus prácticas de fin de carrera. Como cada año, nuestra compañera, la psicóloga Ana Manrique, coordina el exigente programa de formación y la memoria final que deben presentar. Desde octubre de 2020 han participado en un seminario semanal cada sábado, el curso ‘Aprender a Ayudar’ de preparación a la coescucha y escucha, el taller online ‘Ayuda Mutua’ en el que se encuentran personas en riesgo de suicidio o familiares de suicidados y un taller específico sobre suicidios y otro centrado en la gestión emocional y el Mindfulness. La formación que se les ha facilitado combina la experiencia personal personal como participantes con planteamientos teóricos en un ambiente de colaboración y cercanía. Como motor de todo ello, la Psicología Positiva.

El 9 de junio los alumnos mantuvieron un encuentro online con la coordinadora, Ana Marique, y Luis Santiago, editor de este blog. En este post trasladamos como han vivido este periodo de prácticas.

“A lo largo de la carrera nos centramos en el modelo de Psicología Cognitiva Conductual, el Teléfono de la Esperanza nos abre la mente a otro tipo de enfoque y vemos la cercanía a las personas en crisis que llaman”, explicó Isabel. Para esta psicóloga en formación, “el orientador que atiende las llamadas no hace terapia, su ayuda consiste en guiar o acompañar con palabras a la persona en crisis y si es necesario se las deriva un psicólogo. Es una buena herramienta gratuita para la sociedad”.

Los momentos de coescucha situaron a estos estudiantes en el corazón del día a día del Teléfono de la Esperanza. Suena el teléfono una persona agobiada, desorientada o angustiada pide ayuda y una orientadora u orientador la escucha y atiende. De forma anónima, sin recomendaciones, ni juicios. Luisa vivió ese momento y se sorprendió de que hay personas que son llamantes habituales. “Hay gente que se encuentra sola para expresar los problemas que tienen en sus relaciones. Hablan, se les escucha y se sienten bien”. A esta alumna le tocó ver de cerca como hacía su orientación Paco. “Me encantó ver cómo trabaja. Tiene buena memoria, recuerda muchos detalles de casos. He sentido que al llamante la gusta mucho que otra persona de conversaciones anteriores. Él lo hace de forma calmada y acoge a cada uno de ellos. Es muy agradable, sabe detectar recursos potenciales para que la misma persona active un cambio en su situación”.

Otra de las aportaciones de este orientador al llamante “es que no se queda solo en la conversación, trabaja más y sabe recomendar psicólogos, coachs u otras aportaciones”.

La coescucha ha sido una herramienta clave para que los miembros del Practicum constaten de forma directa como se atiende a las personas en crisis. “A veces se pierde el norte  de porque me me metí en Psicología; para ayudar”, revela Aida, otra de las estudiantes.

El próximo sábado publicaremos más testimonios de los alumnos Practicum del Teléfono de la Esperanza

 

 


domingo, 13 de junio de 2021

Esperanza Muñoz dará la charla online 'Aprendiendo para vivir' el sábado 19 de junio dentro del programa 'Entre Amigos'



 

Esperanza Muñoz dará la charla online 'Aprendiendo para vivir' el próximo sábado 19 de junio. Será la última actividad del programa 'Entre Amigos' en el curso 2020-21. Esperanza Muñoz es una veterana voluntaria del Teléfono de la Esperanza que coordina este encuentro mensual con todas las personas que quieran aprender sobre salud emocional y relaciones humanas.

El pasado mes de marzo impartió la charla 'El arte de amar sanamente', que luego trasladó a una entrada de este blog:

El arte de amar sanamente



La ruta para seguir el evento en tu móvil, tableta u ordenador es la siguiente:

1. Entrar en Google y poner de forma exacta el enlace https: //meet.jit.si/ENTREAMIGOS.TEL.ESPERANZA.ONLINE

2. Pincha el enlace y debes estar dentro. Pincha 'Entrar en la reunión'

3. Si entras por teléfono, elige la opción iniciar en la web



jueves, 10 de junio de 2021

Únete a la Ola contra la #soledad




Los voluntarios de la Fundación Endesa han puesto en marcha una campaña de sensibilización sobre el daño que la soledad puede causar a todas las personas que se sienten solas. La pandemia ha puesto delante de nosotros la realidad de la soledad, un problema que puede afectar a cualquier persona, pero que es más frecuente en colectivos vulnerables como niños, ancianos y enfermos.
Diferentes voluntarios de esta fundación aparecen en un vídeo en el que se llama a sumarse a una gran ola contra la soledad. El llamamiento se completa con un agradecimiento a seis organizaciones y asociaciones que vienen haciendo una labor muy importante para paliar la soledad en diferentes sectores de la población. Las entidades mencionadas son Fundación Anair, Mamás en Acción, Teléfono de la Esperanza, Soñar Despiertos, Fundación Amigos de los Mayores y Juegaterapia.

El Teléfono de la Esperanza viene desarrollando desde octubre de 2020 el programa 'La Brújula de la Esperanza' para ayudar a paliar la soledad que sufren las personas mayores en Málaga capital Más de 500 personas han participado en las actividades. Estos son los testimonios de varios de ellos:

Además, colaboramos con la Diputación Provincial de Málaga en el Plan Conta la Soledad de los Mayores haciendo acompañamiento telefónico a 60 personas de la provincia


domingo, 6 de junio de 2021

El Teléfono de la Esperanza entrega el I Premio a la Intervención Psicosocial al doctor Luis Rojas Marcos

 


El Teléfono de la Esperanza está viviendo a lo largo de este año 2021 la conmemoración de los 50 años desde que Serafín Madrid puso en marcha el primer servicio de atención telefónica en Sevilla, extendiéndose posteriormente por toda España y buena parte de América Latina y algunos países europeos. En Málaga trabajamos en salud emocional desde 1976.

Mañana lunes 7 de junio, a las 12 horas, en el Hogar Virgen de los Reyes de Sevilla, el doctor Luis Rojas Marcos recibirá el reconocimiento del Teléfono de la Esperanza por su trabajo en favor de la salud mental y su compromiso con los más desfavorecidos. Concretamente recibirá el I Premio a la Intervención Psicosocial.

En este enlace te informamos de la gran labor relacionada con la salud mental que este psiquiatra andaluz viene desarrollando en Estados Unidos desde hace décadas. También publicamos los nombres de las personas, todas muy conocidas, que representan a diferentes sectores de la sociedad española y reconocemos en esta I Edición de los Premios Teléfono de la Esperanza.



sábado, 5 de junio de 2021

El doctor Arocena, especialista en tratamiento del dolor y voluntario, destaca la importancia de aceptar la enfermedad para integrarla en la vida




José Miguel Arocena ha desarrollado una carrera de más de 40 años como médico especialista en Anestesiología, Reanimación y Tratamiento del Dolor. Actualmente dedica parte de su tiempo al voluntariado del Teléfono de la Esperanza. Cubre turnos en el departamento de Orientación atendiendo a las personas que llaman pidiendo ayuda y coordina cursos. Arocena habló sobre la aceptación de la enfermedad en el espacio semanal 'Estamos a tu lado' de Canal Málaga Radio. Desde su posición experimentada en el tratamiento del deterioro de la salud, distinguió entre el menoscabo físico o mental que objetivamente causa la enfermedad en las personas, del componente subjetivo.  Este se refiere a como cada uno de nosotros vivimos la enfermedad.

La clave de la aceptación de la enfermedad  está en integrarla en la propia vida.

José Miguel Arocena destacó que todo ser humano lleva dentro las armas para posicionarse de forma positiva ante el golpe que supone una enfermedad. “Con la ayuda necesaria, todos podemos desarrollar nuestro perfil de persona en todo su esplendor, no depende de otros, depende de nosotros”, recalcó.

La actitud y los hábitos que las personas mantenemos a lo largo de la vida son muy importantes de cara a la prevención de las enfermedades. Llevar una vida activa, controlar la alimentación, el peso y la ausencia de tóxicos genera un entorno en el que la enfermedad se retrasa y se controla una serie de elementos que determinan nuestra forma de estar en la vida.


Audio sobre la aceptación de la enfermedad (22 minutos)

https://bit.ly/2T1PFcc

martes, 1 de junio de 2021

El diálogo como medio de crecimiento personal

 

                            Foto: www.lamenteesmaravillosa.com                  


Carlos López

Coordinador de talleres del Teléfono de la Esperanza

Dialogar, del griego “dia-logos”,  significa el encuentro entre dos logos o pensamientos que buscan alcanzar una idea mejor o superior. Es el encuentro: voluntad con conocimiento y amor, en busca de lo mejor de uno mismo para poder compartirlo con los demás. Hay verdadera “escucha”, pues va más allá de la empatía o ponerse en el lugar del otro: hay concordia. ('El arte de conversar y dialogar'. Autor: Javier Saura).

El diálogo es como una partida de tenis. Generalmente en nuestros diálogos con los otros, confrontamos  ideas, creencias, valores, opiniones, estilos de vida y pautas de comportamiento. Y a medida que se desarrolla el dialogo, se modifican las percepciones y las actitudes que vamos teniendo y en consecuencia se modificamos los comportamientos y asumimos nuevas decisiones y estratégias sobre el uso de los recursos que nos van surgiendo. Resumiendo: el dialogo define el ámbito de convivencia de los que dialogan, constituyendose momento a momento.

De lo que se deduce que sólo aprendemos a través de vivencias cuando estas nos son significativas, cuando algo nos mueve cuando algo nos provoca la emoción

Las emociones son centrales en nuestra vida. impactan en nuestra memoria porque recordamos mejor aquello que nos conmueve” (Facundo Manes, neurólogo). Nos transformamos en la convivencia porque todo el tiempo estamos en continuo cambio, somos sistemas dinámicos, nuestra fisiología cambia a lo largo del día, todos somos distintos de como éramos cuando nos levantamos por la mañana. Resulta que una cosa dicha aparentemente sin mucha consecuencia, de pronto nos damos cuenta que tiene consecuencias porque uno reflexiona o la mira de nuevo en el silencio o en conversación con algún amigo.

Y porque nos vamos a transformar de todos modos, comprobaremos que  vamos a ir por un lado o por el otro según la circunstancia en la cual nos encontremos,  por ejemplo según lo que escuchemos en la radio en la mañana  nos conmueva  o puede que nos enoje, puede que nos encante o que nos sea indiferente. En todos los casos vamos a surgir  un cambio distinto porque eso va a guiar esta continua transformación en la cual nos encontramos y esto está pasando todo el tiempo.

Las actitudes de algunos de los caminos por los que optamos, nos pueden llevar a tener conflictos con los demás. El conflicto surge cuando las ideas, valores o actos de distintas personas están en contraposición, generando un desequilibrio o malestar.  Si yo estoy en una situación que me resulta amenazante y quiero conservar algo que me es propio y no quiero perderlo, por ejemplo, quiero conservar mi opinión, quiero conservar la dignidad, quiero conservar el respeto por mí mismo a cualquier coste, ese cualquier coste significa que no me importa lo que les pase a los otros.

Todos tenemos ciertas ideas o creencias básicas que queremos conservar, y sobre las cuales no deseamos reflexionar.  La reflexión  nos llevaría a preguntarnos desde uno mismo. La única manera de no estar atrapado en un ideología  o creencia es tener un espacio reflexivo siempre abierto en función de algunos propósitos humanos, sociales o éticos. Por ejemplo si nos preguntasemos: ¿me gusta el vivir que estoy viviendo o no me gusta?. Cuando uno se hace esa pregunta le cambia la emoción.  Cuando uno se hace esa pregunta que es reflexiva, uno ya está en otro lugar, uno ya no puede volver al lugar de donde salió porque ya se hizo la pregunta, ya no es inocente y amplió la conciencia. Podemos decir  que “si” para conseguir que así mis amigos  me quieran. ¿Para qué?,  para qué me acojan aunque se que ese vivir que estoy viviendo yo no lo quiero, lo quiero para que me acepten pero yo en mi realidad no lo quiero. Cuando me doy cuenta de esto, puedo ampliar mi conciencia y lo que me queda seria cambiar mi modo de vivir, porque si soy consciente de algo que me hace daño que no lo quiero tengo que cambiar. Si reflexionamos siempre vamos a ser libres para el conocer, porque vamos a ser capaces de mirar dónde estamos y ver si nos gusta o no nos gusta nuestra vida.

Si no reflexionamos, podemos caer en un fanatismo, en un ámbito de autoridad que queremos que sea absoluta para que el otro obedezca. Puedo  preguntarme ¿me gustó decir lo que dije o hacer lo que hice o no, me gustó las consecuencias de lo que dije o hice?. ¿estamos dispuestos a reflexionar sobre cualquier sistema fundamental? Si la respuesta es afirmativa entonces tenemos la oportunidad  de seguir siendo seres humanos respetuosos capaces de colaborar, de construir un mundo legítimo con otros seres humanos y la única solución será mirar desde donde estamos diciendo lo que estamos diciendo.

La frase que generalmente utilizamos cuando entramos en conflicto con el otro suele ser: "Es que no me escuchas”. Por lo tanto, el escuchar es uno de los factores significativos del dialogo y, curiosamente, de la resiliencia y, por tanto, escuchar y ser escuchado desarrolla en mí -también en el otro- fortalezas afectivas y potencia la autoestima de quienes dialogan. Para que exista una verdadera escucha, el otro ha de ser recibido voluntariamente por mí y yo ser recibido voluntariamente por el otro. Entonces, habrá dialogo y por lo tanto escucha. En ese dialogo, uno y otro, cumplirán alternativamente ambos roles. Ambos serán “admitido” y “admitiente”.

Desde  la escucha activa, podemos correr un riesgo si no la sabemos manejar bien, ya que se puede hacer una escucha activa y aun así, podemos  estar interpretando lo que escuchamos. Corremos el riesgo de colocar en el otro nuestros significados que tenemos de lo que nos dice y, entonces, no estamos escuchando, estamos interpretando. Cuando interpretamos, lo hacemos desde una cierta verdad, desde una cierta realidad y cierta objetividad, la nuestra. Es decir, al interpretar, lo hacemos desde una objetividad y esta nos aleja de considerar al otro como un legítimo otro, en el convivir. La consecuencia de esto es que, el otro no siente que le estamos dando un lugar en la vida. Se siente cuestionado, descalificado y tiene la sensación de que no es escuchado. Cuando esto pasa, el otro no tiene los elementos necesarios para legitimarse, su autovaloración es menor y sus fortalezas quedan relegadas a un segundo plano.

Si somos consciente desde dónde estamos analizando el dialogo, podremos considerar que existe un escuchar adecuado sólo si el otro es un “admitido” para nosotros y, a su vez, somos “admitido” por él, y esto implica soltar nuestras certezas y nuestros principios, implica quedar sin los andamios que me sujetan sin los andamios en los que yo me afirmo, yo conmigo y con lo que pienso. En resumen, solo puedo dejar aparecer al otro escuchándolo desde donde el otro dice lo que dice y no desde nuestros principios.

El filósofo Erasmo de Rótterdam dice "sólo el hombre nace en un estado que por mucho tiempo le obliga a depender totalmente de ayuda ajena. No sabe ni hablar, ni andar, ni buscarse la comida, sólo implorar asistencia berreando para que de ahí podamos deducir que se trata del único animal nacido exclusivamente para la amistad, que principalmente madura y se refuerza con la ayuda mutua. Por eso la naturaleza ha querido que el hombre reciba el don de la vida, no tanto por sí mismo, como para orientarlo hacia el amor, para que entienda bien que está destinado a la gratitud y la amistad".

Nuestro origen es de seres amorosos que hemos nacido en la confianza de ser amados de ser queridos y no de ser traicionados. Salimos del útero biológico al útero cultural. En el útero biológico estamos calientitos y somos alimentados según lo que le toca vivir a la madre, pero despues salimos al útero cultural y a veces tenemos la suerte de que nos acogen, nos nutren, nos amen, nos quieran y otras veces no tenemosesa posibilidad.

Como escribe el Biologo Maturana “Sin amor, sin aceptación del otro junto a uno, no hay socialización, y sin socialización no hay humanidad. En este ambito cuando hablo de amor no hablo de un sentimiento ni hablo de bondad. Cuando hablo de amor hablo de un fenómeno biológico, hablo de la emoción que especifica el dominio de acciones en las cuales los sistemas vivientes coordinan sus acciones de un modo que trae como consecuencia la aceptación mutua, y en la aceptación donde se construyen los fenómenos sociales.”.

Por lo tanto, la convivencia en conversaciones  es dar vueltas juntos, en nuestros haceres y emociones. Esto nos debe llevar a ver en el rostro del otro no a un competidor sino a aquel que configura un mundo conmigo, haciéndonos responsables de ello.