La tasa de suicidios en Japón, un país con una incidencia muy alta de esta lacra, ha disminuido sensiblemente durante el confinamiento. A partir de esta noticia publicada en los medios de comunicación, Magdalena Pérez, psicóloga del Teléfono de la Esperanza especializada en la prevención del suicidio, recuerda que históricamente sabemos que los suicidios bajan en tiempos de crisis importantes. Por otro lado, las cifras conocidas de suicidios en España en los primeros meses de 2019 fueron superiores a las de este año 2020. Se han reducido los intentos de suicidio significativamente y han disminuido los suicidios consumados.
Magdalena Pérez explica en el vídeo que las personas tienen factores de riesgo, factores de protección y factores desencadenantes, destacando que la situación de aislamiento en sus casas es un elemento de protección.
La experiencia de la vida diaria durante el confinamiento ha facilitado a las personas otras formas de manejarse más ajustadas a ellas y menos estresantes que en el día a día en la vida habitual. La ausencia de estrés laboral -que en Japón es muy alto- y también la dificultad para acceder al consumo de sustancias, un factor de riesgo, juega a favor de este anclaje a la vida.
Asimismo, la psicóloga resalta la importancia de las acciones y redes de solidaridad que se han desarrollado porque "han hecho que se muevan dentro de los seres humanos cosas que refuerzan y protegen".
En la prevención del suicidio, como destacamos siempre en el Teléfono de la Esperanza, es muy importante que el hombre o la mujer que sufre un intenso dolor pueda tener un entorno acogedor para expresarse sin trabas, el apoyo de familiares y amigos y aprender a pedir ayudar y a recibirla.
La colaboración de los medios de comunicación facilitando información sobre los recursos de ayuda existentes es fundamental para sensibilizar a la sociedad e informar a las personas que están en situaciones de crisis personales.
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