sábado, 8 de febrero de 2020

CON OTRAS GAFAS / Una voluntaria precoz para cambiar el mundo



Laura Robles, una joven sevillana de 17 años, ha puesto cara esta semana al mundo del voluntariado con la iniciativa personal que ha impulsado en su colegio para apoyar a la campaña que cada año en febrero realiza la ONG Manos Unidas captando fondos con destino a alguno de los 900 proyectos de cooperación al desarrollo que tiene en marcha en todo el mundo.
Laura forma parte de una familia dedicada a la hostelería y ha recopilado 60 recetas en el libro 'La cocina no escrita de mi abuela' que se puede conseguir por 20 euros. Hasta el momento se han vendido 4.000 ejemplares de este libro que hace de puente entre la gastronomía y la solidaridad. Los beneficios del proyecto van destinados a comunidades empobrecidas de El Salvador a las que se apoyará en la mejora de su alimentación.
La actividad solidaria de esta inquieta adolescente no se queda ahí porque, además, tiene el coraje de acudir todos los domingos por la mañana al Hospital 'Virgen del Rocío' donde comparte dos horas de su tiempo con los niños hospitalizados, acompañándoles en actividades en la Ciberaula y 'La azotea azul', un espacio de juegos infantiles sobre el techo del centro sanitario. Laura Robles forma parte del voluntariado de la ONG Prodean.
Laura Robles es una de las casi tres millones de personas que hacen voluntariado en España, según la Plataforma del Voluntariado de España.
La organización católica Manos Unidas lleva a cabo campañas contra el hambre en el mundo desde el año 1960 cuando la iniciaron un grupo de mujeres voluntarias. La acción de esta ONG se despliega mucho más allá de la distribución de alimentos, ya que trabaja para eliminar las causas originales de la pobreza impulsando proyectos de educación, salud, agua y saneamiento, derechos de las mujeres y equidad, derechos humanos y sociedad civil, alimentación y medios de vida y medio ambiente y cambio climático. Precisamente, el cambio climático es el protagonista de los actos de sensibilización de la campaña de febrero de 2020.
La extinción de animales, la tala de bosques, la contaminación de ríos y mares o la sobreexplotación de los recursos están destruyendo la naturaleza y provocando pobreza, hambre y enfermedades en las comunidades más vulnerables de muchos puntos del planeta. La polarización del clima, con aumento de huracanes y tormentassequías extremas (como la que ha causado los incendios de Australia) ponen seriamente en peligro los medios de vida de millones de personas.




Manos Unidas nos propone afrontar ambas crisis, humana y ambiental promoviendo una cultura ecológica que eduque en las consecuencias del cambio climático:
  • Ser inquilinos y cuidadores en lugar de dueños y dominadores del mundo
  • Luchar por la vida digna de todas las personas
  • Considerar las consecuencias medioambientales de nuestras iniciativas
  • Gestionar de forma integral los recursos naturales
  • Comprometernos con los pequeños agricultores y la agroecología y apoyar a los migrantes que se han visto obligados a abandonar sus hogares por causas medioambientales
La propuesta es ambiciosa, implica a toda la sociedad y a los poderes públicos y transmite la necesidad de cambiar modos de explotación de los recursos, de consumo y vida. Personas como Laura Robles y millones de voluntarios lo empiezan a hacer posible cada día actuando en su entorno más cercano.


'Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas puede cambiar el mundo'

Eduardo Galeano

No hay comentarios: