La Plataforma del Voluntariado de España
lanza su primer informe anual sobre voluntariado.
Un total de 2,5 millones de
españoles son voluntarios, un 6,2 por ciento de la población, lo que supone un
"suave" incremento de casi medio punto con respecto al año anterior,
según el informe sobre la acción voluntaria en 2018, elaborado por la
Plataforma del Voluntariado de España.
"Este informe es un
termómetro del grado de solidaridad de la población española. Hay gente
solidaria en este país", ha subrayado el presidente de la plataforma del
Tercer Sector, Luciano Poyato, en rueda de prensa en Madrid.
El informe, que se basa en
una encuesta realizada a 1.500 personas, revela que hay un 32,4 por ciento de
españoles que no hacen voluntariado pero querrían hacerlo, lo que supone un
aumento de tres puntos con respecto a 2017. Los motivos que ofrecen para no dar
el último paso son, entre otros, la falta de tiempo o la falta de información.
"La clave está en ser
capaces de encauzar ese deseo", ha indicado Poyato, al tiempo que ha
resaltado la importancia de la aplicación Voluncloud, que permite a los ciudadanos
acceder desde el móvil a distintas ofertas de voluntariado, en función de su
disponibilidad e intereses.
En cuanto al perfil del
voluntario, es el de mujer (63 por ciento), con estudios superiores (40,4 por
ciento) y estatus socioeconómico alto (47,3 por ciento). "Ya veníamos
observando en años anteriores esta feminización del voluntariado", ha
precisado la directora de la Plataforma del Voluntariado de España, Mar Amate.
Además, sobre el ligero incremento del porcentaje de voluntarios en España, ha
puntualizado que no quieren "hacer grandes alabanzas" sino
"seguir trabajando para que crezca".
En todo caso, un dato que
les ha llamado la atención es que en los últimos cuatro años ha disminuido en
casi cinco puntos el porcentaje de voluntarios dentro de hogares en los que hay
menores de 14 años, pasando de un 8,3 por ciento en 2014 a un 3,7 por ciento en
2018.
Atendiendo a los motivos
para hacerse voluntario, el estudio revela que la principal razón es ayudar y,
entre los más jóvenes también adquirir experiencia profesional (un motivo al
que apuntan el 26 por ciento de 14 a 24 años). Además, preguntados por la
percepción sobre el voluntariado, el 90 por ciento de los jóvenes encuestados
lo ven como una herramienta de transformación social.
Sobre el tipo de
voluntariado, Mar Amate ha puesto de manifiesto que los "roles de
género" también se reproducen en esta actividad pues de los datos se
desprende que las mujeres optan en mayor medida por un voluntariado educativo o
sociosanitario, frente a los hombres que eligen un voluntariado deportivo o de
protección civil.
Si se tienen en cuenta otros
tipos de colaboración fuera del voluntariado como donaciones en especie (de
alimentos, ropa, sangre), donaciones económicas o asociación, el informe revela
que un 40,6 por ciento de la población mayor de 14 años colabora con una ONG.
Esto supone un incremento de diez puntos con respecto a hace cuatro años,
cuando eran en torno a un 30 por ciento.
La cara "menos
positiva", según ha precisado Amate, es que ha disminuido el número de
personas que donan en especie, algo que achacan a la "disminución de la
percepción de emergencia social tras pasar la crisis".
Acceso al informe completo:
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