sábado, 17 de noviembre de 2018

CON OTRAS GAFAS / Aporofobia, rechazo de los pobres.


aporofobia


José Portillo, orientador del Teléfono de la Esperanza, impartió el pasado jueves la siguiente conferencia en nuestra sede con motivo del Día de la Escucha, dedicada este año a la escucha de los personas en exclusión social.       


Definición de pobreza

Llamamos pobreza al desprendimiento de bienes materiales no indispensables para vivir dignamente de ciertos seguidores de diferentes caminos espirituales, y al hecho de no poder satisfacer las necesidades físicas y psíquicas consideradas básicas para poder vivir dignamente. Recursos necesarios para vivir dignamente, son: la alimentación, la vivienda, la asistencia sanitaria, la educación, el agua potable y la electricidad. La carencia de trabajo y consiguientemente de medios económicos impide conseguir dichos recursos. El desempleo y la carencia parcial o total de ingresos tiene como consecuencias la marginación, la exclusión y la segregación de los pobres. Según el premio nobel Amartya Sen, quien se inspiró en la Filosofía de Aristóteles, ser pobre no consiste tanto en carecer de dinero y bienes suficientes, como en la incapacidad para alcanzar la realización vital. Desde este punto de vista, la carencia de valores también constituye parte esencial de la pobreza humana.



Tipos de pobreza

Pobreza material. La pobreza material se da en los países que presentan los índices de exclusión social más bajos. En tales países es bajo el índice de escolaridad, y entre sus habitantes destacan las desigualdades laborales y económicas. La carencia de medios para vivir dignamente aumenta la violencia social.

Pobreza rural. La pobreza rural se produce cuando la mejora económica es desigual en las zonas rurales y en las zonas urbanas.
   
Pobreza urbana. La pobreza urbana se da en las ciudades en las que existe un flujo constante de emigración campo-ciudad. Las ciudades se fragmentan cuando los emigrantes son perceptores de sueldos más bajos que los habitantes de las mismas.

Pobreza social. La pobreza social se mide teniendo en cuenta los auxilios que reciben las personas con bajos recursos dentro de una sociedad. En este caso, se considera que ser pobre consiste en pertenecer a una categoría dentro de un conjunto de personas.

Pobreza infantil. La desigualdad social suele generar pobreza infantil, y sus efectos se imponen desde las edades más tempranas vitales. La pobreza infantil afecta el crecimiento, la salud y el desarrollo cognitivo, emocional y conductual de los niños.

Pobreza relativa. La pobreza relativa se da en los países en que la precariedad sólo afecta a parte de los mismos, en las que no se han adoptado las medidas adecuadas para combatir las carencias. Quienes la padecen pueden alimentarse, pero no son perceptores de servicios sociales.

Pobreza absoluta. Para que el estado de pobreza se considere absoluto, la línea de pobreza tiene que ser la misma para uno o varios países, sin importar su nivel cultural ni su desarrollo tecnológico.

Pobreza estructural. La pobreza estructural afecta las condiciones vitales de un conjunto de personas que forman parte de una sociedad, en la que existen estratos sociales desiguales. A modo de ejemplo, unos tienen derecho a ser perceptores de la seguridad social, y otros no.

Pobreza extrema. La pobreza extrema se refiere al estado de pobreza más bajo, e incluye a quienes no pueden costearse los alimentos que necesitan en un tiempo determinado ni son perceptores de servicios sociales.

Sentimiento de pobreza. El sentimiento de pobreza es consecuente de la frustración de quienes se comparan a la baja con quienes tienen más riquezas que ellos, y desvalorizan sus capacidades y los medios con que cuentan para salir adelante. Karl Marx dijo: "Sea grande o pequeña una casa, mientras las que la rodean son también pequeñas cumple todas las exigencias sociales de una vivienda, pero, si junto a una casa pequeña surge un palacio, la hasta que entonces era casa se encoge hasta quedar convertida en una choza y por mucho que, en el transcurso de la civilización, su casa gane en altura, si el palacio vecino sigue creciendo en la misma o incluso en mayor proporción, el habitante de la casa relativamente pequeña se irá sintiendo cada vez más desazonado, más descontento, más agobiado entre sus cuatro paredes." 

Datos sobre la pobreza

Según la web de Objetivos de Desarrollo del Milenio de la ONU:

  • 100.000 personas mueren de hambre todos los días
  • Cada 5 segundos un niño menor de 10 años muere de hambre
  • 1.000 millones de personas viven bajo el umbral de la pobreza extrema, de las cuales el setenta por ciento son mujeres
  • Más de 800 millones de personas no tienen acceso a agua potable
  • 1.000 millones de personas carecen de vivienda digna
  • 795 millones de personas están mal nutridas según el Banco Mundial de Alimentos, de las que 200 millones son niños menores de cinco años. Según el Banco Mundial de Alimentos, la cifra de malnutridos pasaría a ser de 645 millones, si las mujeres accedieran a l a agricultura
  • 2000 millones de personas padecen anemia por falta de hierro
  • 880 millones de personas carecen de acceso a servicios básicos de salud
  • 2000 millones de personas no tienen acceso a medicamentos esenciales
  • 66 millones de niños escolarizados pasan hambre
  • 68 de personas se han desplazado huyendo de la violencia, las persecuciones, las guerras, su orientación sexual o la pobreza
  • Según Cáritas España, 13% de españoles trabajadores no pueden cubrir sus necesidades básicas por la precariedad de su trabajo
  • El Instituto Nacional de Estadística registra que cuatro millones de personas se sienten solas en España, pues, aunque muchas no viven solas, se sienten aisladas.






Definición de aporofobia

Según la filósofa y catedrática de Ética y Filosofía Política de la Universitat de Valencia Adela Cortina, quien también es miembro de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, la palabra aporofobia viene del griego aporos (sin recursos) y aforos (temor, pánico). Llamamos aporofobia al miedo, a la aversión o al rechazo a los pobres. No pocos sienten miedo porque cada año aumenta el número de africanos, asiáticos y sudamericanos que vienen a nuestro país, los cuales serán perceptores de servicios pagados con el dinero recaudado por los impuestos de los trabajadores, lo cual les hace temer la posibilidad de dejar de ser perceptores de servicios que tienen en la actualidad, tales como prestaciones del seguro social. Los inmigrantes y refugiados no son despreciados por ser extranjeros, sino por ser pobres.
Los pobres nativos de nuestro país también son víctimas de la aporofobia, porque la crisis económica nos ha hecho ver que la gran mayoría de trabajadores pueden perder su fuente de ingresos en cualquier momento. El 47% por ciento de carentes de hogar de nuestro país han sido víctimas de delitos de odio.



Los defensores de la aporofobia afirman que los pobres se hacen a sí mismos, y que son culpables de las situaciones de miseria que los caracterizan. No reconocer que la pobreza proviene de la estructuración social, significa que los pobres son percibidos como una amenaza, por lo que, al perder la empatía respecto de los mismos quienes se dejan guiar por el miedo, se ven abocados a ignorarlos y a perseguirlos. Según el Ministerio del Interior, la aporofobia es un delito de odio, y el odio a los pobres se puede debilitar reforzando el discurso de la igualdad y del respeto a los derechos económicos y sociales, lo cual es el fundamento del estado del bienestar, que ha de eliminar las desigualdades, promoviendo la educación en el respeto a quienes son diferentes y la solidaridad.
Para no despreciar a quienes son diferentes a nosotros, necesitamos educarnos para ser tolerantes, para defender la igualdad y la equidad, ya que todos tenemos deberes y derechos, independientemente de las diferencias que nos caracterizan.

Definición de tolerancia

Llamamos tolerancia al respeto a los demás. La tolerancia nos impulsa a aceptar a quienes son diferentes a nosotros, y por consiguiente también nos ayuda a trabajar para que las diferencias que nos separan, en lugar de ser vistas como creadoras de conflictos, sean percibidas como fuentes de riqueza común. La tolerancia se opone al etnocentrismo, que nos hace percibirnos como superiores a quienes tienen una cultura y una manera de ser diferente a la nuestra, por lo que nos hace prejuiciosos. Lo contrario al etnocentrismo es el relativismo cultural, mediante el que aprendemos a valorar todas las culturas, con la excepción del alcance de los límites de la tolerancia, consistentes en la intolerancia y en tolerar lo intolerable, ya que todos los comportamientos no pueden ser aceptados a priori.
Protágoras, un conocido sofista nacido el año 490 antes de Cristo, dijo: "El hombre es la medida de todas las cosas, de las que son en cuanto que son, y de las que no son, en cuanto que no son." Según los sofistas, cada persona es propietaria de su verdad. El relativismo defendido por los sofistas, fue visto por Platón en muchas ocasiones como escepticismo. Somos iguales en cuanto que somos diferentes, y podemos esforzarnos para conseguir que nos vincule más lo que nos une, y para que nuestras diferencias no dificulten las relaciones que tenemos y podemos tener en el futuro.

1. En los siguientes enlaces se puede leer información sobre los diferentes tipos de pobreza existente.

2. En los enlaces de El País hay información sobre la aporofobia.

3. Objetivos de Desarrollo del Milenio de la ONU

4. Datos del hambre | WFP | Programa Mundial de Alimentos Luchando contra el hambre en el mundo

5. Manuel Muñoz Eras. ‘Inteligencia emocional y pensamiento positivo. Guía de uso cotidiano’. Libro Hobby Club, 2008.

6. Karl Marx (1957). ‘Trabajo asalariado y capital’. Moscú: Ediciones Progreso.


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