Publicado en Navarra.com
Dieciséis años hace que el Teléfono
de la Esperanza decidió
que la Navidad fuera una época en la que la soledad quedara desterrada, un
problema que afecta a unos ocho
millones de personas en
España. Por ese motivo, en Navarra creyeron que la mejor manera era reunir a
aquellas personas que se sienten
solos en este periodo, especialmente sensible para muchos, y
cenar con todos ellos.
En el 2016 el
objetivo sigue siendo el mismo. El Teléfono de la Esperanza reúne esta Nochebuena a unas 70 personas,
entre usuarios del servicio y personal voluntario, para llenar estómagos y el vacío de la soledad.
En concreto, este año se han apuntado a la cena unas 54 personas con un perfil
muy variado.
La soledad no
entiende ni
de edades, ni de sexos, ya que, según advierten desde esta
organización, "puede afectar a muchas personas, especialmente a aquellas
que tienen problemas
psicológicos".
Como cada año,
la sociedad gastronómica Gazteluleku son los encargados de poner el plato en la
mesa y, en esta ocasión, el menú
consistirá en una
serie de entrantes, cardo en su salsa, merluza Pil-Pil y solomillo con salsa de
piquillos. Con el postre llegarán los turrones y, por supuesto, la alegría y diversión.
Los bailes suelen cerrar esta cena en la que, incluso,
algunos pasan de llegar solos a regresar
a sus hogares acompañados. Al final, la iniciativa persigue subir el ánimo a personas que, con motivo de estos
días señalados, se sienten más tristes o están pasando un duelo tras
la pérdida de un ser querido.
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