El Teléfono de la Esperanza conmemora el Día de la Mujer con la conferencia 'Alma de mujer. La piedra angular del ciclo de la vida' el 15 de marzo a cargo de la doctora Margarita Souvirón. Hoy visita 'El tiempo de la esperanza' para hablarnos del papel de la mujer en la sociedad y su capacidad para crear vida y felicidad.
'Alma de mujer. La piedra angular del ciclo de la vida'. Un título sugerente para una conferencia con motivo del Día de la Mujer. ¿Que quieres transmitir?
Me gustaría que se entendiera que yo siento a la mujer como el alma de la vida, si entendemos ésta como un todo, que abarca lo que respira, y que debe estar protegido y cuidado por el ser humano. Así como Dios o la Inteligencia Superior lo creó todo, su rastro continúa en el mundo en forma de lo que se sigue creando a lo largo del tiempo y a partir de lo femenino.
Las exigencias y ocupaciones de la vida de hoy parecen altas para cualquiera. ¿Que espacio le queda a la mujer para vivir con conciencia de que es 'piedra angular'?
Cuando la mujer tiene un papel exclusivo en el hogar y en la maternidad, sobre todo en el modelo clásico de las tribus o de las familias que hemos conocido en los siglos anteriores, tiene una conciencia clara de ese punto que sostiene la estructura. El reto está en poner esa misma energía en todos los ámbitos de la vida, incluido el trabajo, el arte, la cultura, y la política para conseguir un mundo creativo, maternal y más cercano a la Naturaleza.
En el teléfono hemos iniciado el taller 'Cuidando al cuidador'. Las dos coordinadoras son mujeres y la mayoría de los participantes también. ¿Por qué la mujer ha dado siempre ese paso adelante y el hombre mucho menos?
Esta respuesta enlaza con la anterior. La mujer se acerca sin miedo y con más entrega a todo lo humano, a la vida en su principio y su fin. El alma femenina da a luz y su instinto entiende mejor la relación entre los humanos. Pero no hay que olvidar que el hombre tiene su parte femenina y la mujer su parte masculina. Cuando hablo de estas cosas me refiero también a la feminidad que reside en el alma de los hombres.
¿Que cuida más la mujer? ¿El cuerpo ¿El alma?
A simple vista parecería que la mujer cuida más el cuerpo que el alma, sobre todo si nos fijamos en la moda, el cine, la alta sociedad, la imagen de la juventud…pero no es menos cierto que tradicionalmente la mujer también es más religiosa, tiene un sentido más arraigado de la trascendencia y recurre más a su interior. No hay más que contar el número de mujeres que asisten a una iglesia, a una terapia, a una meditación, a una clase de yoga o a un encuentro de psicología. Creo que la mujer está más cerca de su propia alma.
Eres médico homeópata, dietista y utilizas técnicas de fitoterapia. ¿Qué aporta cada una de ellas al bienestar personal?
Según Hipócrates, el mejor medicamento debe ser un alimento. Esto quiere decir que el ser humano se podría mantener sano con una alimentación correcta y que los alimentos bien utilizados tienen propiedades curativas. En ese mismo sentido, la fitoterapia trata las enfermedades con los principios de las plantas, sin transformación química, lo cual permite curar de forma más natural. La homeopatía también es una forma de usar el arte médico desde una perspectiva preventiva, y respetuosa con el proceso de la enfermedad.
Has participado en el grupo de teatro 'El carromato', del Teléfono de la Esperanza. ¿Qué ha aportado el teatro a tu vida? ¿Y la poesía?
El teatro me permitió conocer un mundo maravilloso de fantasía en el que quedas atrapada fácilmente porque combina la ilusión de ser otra persona con la posibilidad de comunicarte con mucha gente al mismo tiempo. La poesía es otra cosa…la poesía para mí es lo esencial, lo que más feliz me hace y de dónde saco el sentido de la vida.
El teatro ya era utilizado por los jesuitas en la enseñanza en el siglo XVI. ¿Es una buena herramienta pedagógica?
Es una magnífica herramienta pedagógica y terapéutica. Hemos tenido experiencia con niños y el teatro les hace perder la timidez y les sube la autoestima. También los adultos tenemos mucho que aprender y sanar a través de una actividad que está abierta a todo el mundo. Creo que hacer teatro debería ser parte de alguna asignatura en los colegios y que cualquiera que quiera abrirse a la vida debería pasar por un escenario.
3 comentarios:
Qué poco desarrollada está la parte femenina del hombre. La mujer aprendió a crecer en todas las facetas de la vida. El hombre ha quedado atrás, pese a todos los esfuerzos institucionales, en ese desarrollo integral. Hay alguno que avanza por su cuenta no sin gran esfuerzo.
La sociedad ha de caminar hacia una fraternidad-sororidad que desarrolle tanto el ánima -que representa el lado femenino de la psiquis del varón- y el ánimus, la parte masculina de la psiquis femenina.
Saludos cordiales
En mi experiencia como coordinadora de talleres de cuidadoras observo que el hombre se va incorporando cada vez mas a las tareas de cuidados.
Cuando a un taller acuden hombres y mujeres y éstos aportan la parte maculina de su experiencia, el resultado es muy enriquecedor.
Sludos
Estoy de acuerdo con sus pensamientos y sensaciones sobre la mujer, siento, que por motivos de salud, no pueda ir a la charla, seguro que tus palabras me hubesen enrriquecido en un tema por lo que me siento implicada. Muchas gracias y espero coincidir mas adelante.
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