Semana de Pasión y emociones a flor de piel

La Semana Santa es un periodo para disfrutar del tiempo libre, la familia y los amigos. Días de salidas y encuentros propicios a la relajación y a que fluyan las emociones y sentimientos. La gran tradición de las cofradías y hermandades nos ofrece un abanico de propuestas para disfrutar de ellas y dejarse llevar por los sentimientos de belleza, emocion, sensibilidad artística, devociones y religiosidad popular. 
En este post, hacemos una serie de propuestas dirigidas a disfrutar de los diferentes aspectos de la Semana Santa de Andalucía, que cada primavera "anda pidiendo escaleras para subir al madero a quitarle los clavos a Jesús el Nazareno", como cantó Antonio Machado. Será por eso que cada pueblo de cualquier rincón de Andalucía tiene a un Cristo que carga con su cruz y al que sigue una madre dolorosa. 

Las procesiones. Además de Málaga y Sevilla, la Semana Santa andaluza ofrece grandes procesiones con momentos de enorme algarabía popular o escenas íntimas y sencillas en rinconces escondidos. Estos son solo algunos de los destacados:

Antequera. Las cofradías destacan por la antiguedad de sus imágenes y enseres la tradición de 'correr la vega' que consiste en subir los tronos a gran velocidad por empinadas cuestas el Jueves y Viernes Santo. Diez hermandades salen a la calle durante la semana. Se pueden admirar grandes tallas barrocas de autores como Andrés de Carvajal y Miguel Márquez. 

Puente Genil. La Semana Santa de este pueblo cordobés está declarada de Interés Turístico Nacional. Se forjó a lo largo de los siglos con una singularidad, aúna procesiones desde el Sábado de Pasión (hoy) hasta el Domingo de Resurrección con desfiles de corporaciones bíblicas. Cientos de vecinos desfilan en formaciones agrupadas y caracterizados por personajes del Antiguo y Nuevo Testamento. Hay patriarcas, profetas, apóstoles y, entre otros muchos, los diferentes grupos del pueblo judío.

Frigiliana. Muy recomendable acudir a este pueblo malagueño en Semana Santa. Turistas y vecinos disfrutan del paso de sus procesiones por sus largas, intrincadas y blancas calles. Conserva la curiosa tradición de las máscaras de los apóstoles, algunas de ellas del siglo XVII. Uun grupo de vecinos se caracteriza de apóstoles con ellas y celebra el Descendimiento de la Cruz el Viernes Santo. También salen con ellas el Domingo de Resurrección.

Emoción vestida de música. El género musical de la marcha procesional nació en el siglo XIX cuando se tocaban marchas fúnebres a las procesiones. Después evolucionó en composiciones propias, recogiendo influencias de las músicas militar y tradicional. A tradición, a Andalucía en estado puro suena este 'Pasan los Campanilleros', del compositor Manuel López Farfán, que han versioneado innumerables agrupaciones musicales y cantautores como Carlos Cano. 

Dos portales para escuchar marchas en la red:

Patrimonio musical
Marchas de procesión

Espiritualidad. La bulliciosa Semana Santa andaluza ofrece momentos de silencio, en los que parece que se ha parado el tiempo. Nazarenos e imágenes avanzan sin música, apenas acariciados por el aire de la madrugada y sin cornetas, ni tambores. En Málaga, merece la pena dejarse contagiar por el halo místico que envuelve al crucificado de la Redención el Viernes Santo y la Virgen de los Dolores, acunada con piezas interpretadas por una capilla musical compuesta por flauta, fagot, clarinete y oboe. En Sevilla, en esa linea, desfilan en la madrugada del Viernes Santo hermandades como el Silencio o el Gran Poder. Ronda cuenta el Jueves Santo con la Vera-Cruz moviéndose por increíbles callejones acompañada por los sones tenues de una música de capilla.

Representaciones.
Capítulo aparte, merecen las representaciones teatrales de la Pasión de Jesús. Una de las más destacadas, con fama internacional, es la de Riogordo (Málaga), en la que 500 vecinos del pueblo ensayan durante el año para ponerla en escena en un escenario de varios miles de metros cuadrados. También son muy emotivas las de Carratraca y Casarabonela, también en Málaga.